Desafíos emergentes
Como Hermanas Maestras Católicas, necesitamos volver al Dios cercano y compasivo de Jesús, que restaura nuestra humanidad y hace resurgir en nosotras la profunda alegría de pertenecerle y la valentía en la coherencia de nuestra vida.
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| "Milagro del mejor vino" Nos urge conocer, comprender y vivir la riqueza de nuestra espiritualidad, vivenciando el gozo de ser “Esposas de Jesús” y “Apóstoles de los Pobres,” apasionándonos por la primacía de Dios, que se expresa en castidad como amor encarnado, en pobreza como sencillez de vida y solidaridad con los pobres y en obediencia como libertad evangélica y comunión. |
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| "Volver al Dios cercano y compasivo de Jesús" |
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